lunes, 10 de agosto de 2015

Venezuela Herida...

Llevo mucho tiempo sin publicar nada en mi blog pues en la época en la que escribía, tenía 7 blogs y mucho tiempo para administrarlos, cosa que fue cambiando año tras año. También cambió la importancia que se les da a éstos, los hábitos y las redes favoritas, pero lo que más ha cambiado ha sido mi país: Venezuela.

En 2007 cuando escribí acá por última vez, estaba en actividad política universitaria, acostumbraba a ir a cuanta marcha surgiera pues mi país me necesitaba, entregábamos información puerta a puerta, hacíamos constantes reuniones sobre Cómo ofrecerle al país un cambio para mejor sin caer en politiquerías, sin que fuera más de lo mismo, sin que nos pisara la bota del Poder Totalitario que tenía el gobierno desde 1998... La gente nos recibía, muchos de forma amable y con atenciones, otro se reían y nos llamaban adecos, a otros sólo les interesaba que les lleváramos comida, agua, atención médica, y hasta fuimos objeto de burlas, asaltos y corridas de barrios, pero estábamos allí para ofrecerle una alternativa a la gente y educar a un pueblo que quería regalos del gobierno en vez de educación y trabajo.

Cuántas mentiras han caído sobre Venezuela... Desde la muerte a desfecha del ex presidente Chavez, la falsa victoria de Maduro, el dejar pasar que, sin gozar de salud Chavez fuese lanzado como candidato y después de haber "ganado" otorgarle el cargo a Maduro cuando por ley debió asumir el cargo Diosdado mientras se organizaban unas nuevas elecciones... Nada de eso pasó, nada fue hecho según la ley de nuestro país, y todos fuimos testigos silentes de tal atrocidad... Culpables desde la ignorancia y víctimas de un poder autocontrolado donde el pueblo sólo está para hacer bulto y aplaudir. Y cómo exigir algo ante el CNE si cuando pasó todo este desastre ya estos señores estaban también con su mandato vencido? Y una vez más... No hubo unión, nadie reclamó un nuevo CNE.

Los venezolanos cada día más politizados, parcializados, polarizados... Enemistados. Se acabó el respeto hacia quien piensa distinto, hacia el pobre, hacia el rico, hacia el que trabaja en un Ministerio, hacia quien ha levantado su propia compañía, se acabó la clase media... Llegamos al punto en que todos parecen malos! Por donde vivan, donde trabajen, donde coman, donde compren comida... Se perdió el cariño por ser vecino, incluso las familias dejaron de ser familia. Qué nos pasó?.

Fuerzas Armadas. Qué difícil. Las recuerdo con tanto honor y respeto de cuando era niña, tanto miedo en mi adolescencia pues corríamos cuando venía la recluta, tanto orgullo pues tengo familiares que pertenecen a ella, y de pronto, Chavez los puso a vender papas y verduras... Qué?! Insólito. Pero incluso vendiendo papas les han aumentado más el sueldo y la calidad de vida que a los maestros, verdaderos forjadores de venezolanos, más que a los obreros, más que a los médicos, quienes entregan sus vidas por salvar otras en nuestra agitada tierra... Pero eso no quedó allí, pasaron de vender papas a vender el país, a no importarle en lo absoluto su gente. El año pasado, 2014, cuando la gente se cansó de tanta impunidad y violencia que corre en nuestras calles, estos militares recibieron órdenes de matar, sí, matar, asesinar, sin piedad, a un pueblo que estaba cansado de tanta barbarie. La sangre corrió en todas las ciudades de nuestro país a manos de estos criminales y en conjunto de un hampa armado por el mismo gobierno...

"Nadie hace nada" dicen en redes sociales pues ya no hay medios de comunicación que transmitan lo que pasa, están silenciados por el gobierno, o cerrados. Pero resulta que mientras la mitad del país salió a la calle a exigir respuestas ante tanta violencia, desabastecimiento, impunidad, arriesgándose a morir en manos de esas bestias, o ser preso político, torturado, vejado, la otra mitad prefiere esperar las dádivas de un gobierno que solo reparte armas, hambre y miseria. Un gobierno que prefiere hacer pacto con los malandros antes que escuchar a quienes le adversamos en pensamiento político pero que sin duda somos tan o más venezolanos que él.

Hoy en día los venezolanos pensantes parecemos tener sólo dos opciones: O sobrevivir a una Venezuela de escasez, crímenes atroces sin castigo, colas para comprar comida por número de cédula, precios inpagables, empresas quebradas, baja producción nacional, importaciones prohibidas, prensa silenciada, control cambiario, corrupción descarada, conformismo cotidiano e irrespeto generalizado; o intentar arrancar de cero en otro país, dejando todo, sin dólares, sólo con un boleto muy difícil de encontrar y pagar, y la vida que quepa en 2 maletas... que nos cobije con la esperanza de conseguir empleo, una vida digna y ver crecer a nuestros hijos en una cultura probablemente muy distinta a la nuestra.

Qué nos pasó? En qué momento dejó de importarnos ser la Tierra de Gracia por ser la Ciudad de la Furia?

Yo quiero mi país de vuelta. Quiero a mi Venezuela Libre! La de las casas con puertas abiertas en Navidad donde cualquiera puede comer en nuestra mesa, no la de encerrarse en casa porque "puede pasar algo", la de las comparsas de carnaval con papelillos y caramelos, no la de las marchas con bombas lacrimógenas y balas... La de las mujeres bellas, ganadoras de certámenes, no la de mujeres golpeándose por un paquete de leche. Quiero a mi país unido en las ganas de progresar y construir un presente próspero para poder ver los frutos tricolor en nuestros hijos y nietos.

Quiero mi Venezuela de vuelta!


Ojalá fuera mentira...

Ojalá fuera mentira...
¿Libertad de pensamientos e ideales?

Serán flores???

Serán flores???
Estos son estudiantes del 23 de Enero, armados!... de liceo... la revolución bonita pues!